Tony invita a su hermana Lena a visitarlo unos días antes de su boda con Carlos sin decirle la ocasión. Al llegar, Lena confunde a Carlos con el compañero de cuarto de Tony y queda cautivada por su masculinidad. Carlos los lleva a un restaurante familiar, donde están en marcha los preparativos para la recepción. Lena, que resulta ser homofóbica, se equivoca con muchas indirectas, pero finalmente adivina sobre la boda de su hermano. Tony ocultándolo todo este tiempo molesta a Carlos y lo obliga a irse. Un intercambio sincero entre Tony y Lena conduce a su despedida. Tony encuentra a Carlos en su lugar y demuestra que no tiene miedo de abrirse ahora. Al ver una foto de su boda, Lena le oculta un secreto a la familia.